DECLARACION PUBLICA ASOCIACION PARA LA DEFENSA DEL AMBIENTE Y LA CULTURA DE CHILOE (ADAC)
P.J. 145188. Achao, 7 DE Mayo 2016

ADAC tiene como misión la defensa del ambiente y la Cultura de Chiloé por el estrecho vínculo entre ambas, y especialmente ahora que se ven tan drásticamente amenazadas.

La cultura chilota tiene sus raíces en la concepción de los pueblos originarios de la unidad y armonía entre naturaleza y el hombre. De allí nace su respeto y el cuidado por la naturaleza y por su uso sustentable. También de allí se funda el sentido de fraternidad, solidaridad y sentido comunitario que aún se puede percibir en la actualidad.

ADAC Chiloé ve con preocupación que esta cultura del respeto y la armonía con la naturaleza va desapareciendo amenazada por una cultura dominante de la sociedad de consumo que no entiende esta visión de la vida. Incluso pretende reducir las iglesias de Chiloé a meras piezas de museo de uso mercantil y no como una instancia de vida comunitaria.

Ante los eventos ambientales y las consecuencias que está teniendo en la vida de Chiloé, ADAC CHILOE señala:

1.- Chiloé entero ha despertado valientemente para clamar por el impacto de la gran industria sobre el mar interior, y por la incertidumbre y desconocimiento ante fenómenos naturales e inducidos que lo afectan.

2.- La Marea Roja siendo un fenómeno natural puede ser gatillado e intensificado por el hombre, como el vertimiento de residuos organicos de las industria acuícola y muy significativamente de la mitilicultura y la salmonicultura. Estos generan cargas orgánicas adicionales al agua y al fondo que aparentemente sobrepasan la capacidad de carga y promueven ajustes en el ecosistema os graves imprevisibles e inciertos.

3.- Las informaciones de prensa han sugerido que los Cambios Climáticos Globales y el Fenómeno de El Nino son los causantes de esta Marea Roja. Reconociendo condiciones atmosféricos inusuales que favorecen el crecimiento de Alexandrium catenella, estos factores parecen de menor importancia en comparación con el impacto del exceso de nutrientes aportados por la industria acuícola en el mar interior de Chiloé.

4.- La industria acuícola realiza sus actividades al borde o sobrepasa una legislación ambiental y social que por sí misma frágil y permisiva. Ha dañado el borde costero, el fondo marino, las aguas del mar interior y el paisaje que tanto se ofrece a los turistas. Más aún ha causado impactos graves en la sociedad y cultura de Chiloé desarticulando la vida rural y reemplazándola por un modo urbano ajeno a su identidad.

5.- La institucionalidad del país incluida la academia y a pesar de las inversiones realizadas que nos parecen parciales y atomizadas no logran abordado integralmente y en el largo plazo las problemáticas del ambiente y de la cultura de Chiloé. Esta institucionalidad no logra dar las respuestas que la ciudadanía con toda justicia reclama hoy.

6.- A pesar de la gravedad y duración de este fenómeno y del estado de deterioro persistente del ambiente marino y de la cultura se echa de menos un plan de contingencia del estado y de las empresas y de la academia y de largo plazo para abordar el desconocimiento de la estructura y funcionamiento del sistema ecológico.

7.- Se hace ineludible fijar los criterios sistémicos que regulen la capacidad productiva, y la capacidad de carga.

8.- En esta revisión del sistema de concesiones acuícola y el funcionamiento de las actuales, no puede seguir primando el criterio economicista por sobre consideraciones ambientales para su otorgamiento y mantención, y con el claro propósito de desafectar las áreas más impactadas o frágiles como son los santuarios naturales. Estos no han sido apropiadamente protegidos a pesar de su alta biodiversidad y ser sitios de aposentamientos masivos aves migratorias o mamíferos y desafectar también áreas adyacentes a áreas urbanas y aldeas de estilos de vida rural.

9.- Es urgente una evaluación crítica por parte de la empresa acuícola de la incidencia y de las responsabilidades que pudieran tener en la generación y mantención de esta crisis ambiental, sanitaria y social. Por extensión es urgente una evaluación integral por parte de la empresa acuícola después de 4 décadas de inserción en Chiloé.

Igualmente, se espera una participación efectiva de la industria acuícola en la reparación o subsidio que el estado tiene contemplado para los pescadores directamente afectados.

10. – El daño ocasionado requiere de una activa participación del estado y de la contribución por vía de tributos de la industria, para financiar no sólo las investigaciones, sino de un centro provincial universitario que aborde objetiva e integradamente el conocimiento y conservación del complejo sistema ambiental/ cultural del Archipiélago de Chiloé.

11.- Los planteamientos anteriores se articulan con los históricas demandas de la comunidad chilota: acceso a la salud de excelencia a través de una red de establecimientos de salud acordes con las necesidades insulares con un hospital base de alta complejidad en la capital de la provincia; acceso a la educación superior a través de una universidad pública de alto nivel educacional e investigación independiente y pertinente a las problemáticas e identidad propias del Archipiélago de Chiloé.

12.- Esperamos que este despertar no se reduzca a una solución monetaria. Chiloé no puede cambiar oro por cuentas de vidrio. Muy por el contrario esperamos avanzar participativamente en la identificación y solución de los problemas de fondo del ambiente y la cultura de Chiloé. Crecer sin dejar de ser Chiloé. Crecer en base a los valores y tradiciones propios.

Cuando el mar se enferma
La cultura se enferma
Cuando el mar de Chiloé muera
La cultura chilote morirá

Cuando la industria no gana a manos llenas
Vende, junta la plata y se va a otra parte a hacer las suyas.