Para mi amigo Carlos Trujillo

Es verano y ayer llovió
Cantarosa y cantarina fue la lluvia
Repiqueteante durante la noche
Mojadora de caminos y arboledas
Enfriadora de aires y limpiadora de cielos
Bajó el frío, me dijo mi Nana.
¡Qué diablos pasa con este tiempo?
Le oí gritar desde el pasillo, airada
¿Qué le pasa Nana? Pregunté.
¡Es que me duelen los huesos con este tiempo de miércale!
Me dijo.

La comprendí a la pobre
Lleva a cuestas sus esqueletos dolientes
Desde aquel año en que le descubrieron Diabetes
Y otras cosas más que la atormentan
¿Qué le pasará a este tiempo de miércale?
¿Qué le ha dado por temblar ahora a la Tierra?
¿Qué será que ya ni los perros ladean?
¿No será que vendrá el Caleuche?

¿Qué será lo que pasa?...
Que ahora pasan tantas cosas juntas?
Cosas que nunca antes pasaban?
¡Es como si se quisiera jundir el mundo oye…
De repente, como en el sunami
¡Sin que nada podamos hacer para impedirlo!

Es incierto este futuro
¿Qué futuro Nana? Pregunto
El de este año poh…¿Cuál otro poh?
(me dice medio llorando)
Yo le digo que es algo raro…
Porque ni mi amigo Carlos Trujillo
Me ha escrito un par de letras siquiera…
¡Tan buen escribidor que era el Carlos
¿Qué le habrá pasado que ya no escribe?

¡Vaya uno a saber…! ¡Vaya uno a saber!...
Y sus pasos se pierden al final del pasillo
Lleva arrastrando –de mala gana-
Una escoba para …¡dar por allí unos escobazos!
¡Que le vamos a hacer!...

Y la lluvia de verano…
Vuelve a repiquetear sobre los techos.